Cuando se inventaron las computadoras solo algunos pocos podían usarlas. Esos que se dedicaban a utilizarlas fueron creado interacciones que reducían la fricción entre entender como funcionaban sus sistemas, para que “entender” no fuera necesario. Así nació la metáfora de la ventana que nos permite interactuar en una pantalla con la computadora, el monitor. Así mismo el teclado y el mouse redujeron esa fricción. Eso aumento exponencialmente las personas que podían aprender a usar una computadora sin entenderla. Más adelante esa fricción se reduce más aún con las pantallas táctiles.

Ahora todos pueden interactuar y sacar provecho de un dispositivo con capacidades computacionales nunca antes vistas. Con la llegada de la Inteligencia Artificial se va eliminando la fricción. Con los asistentes personales ya no hay que tocar tanto la pantalla. Ahora una persona que no tiene manos o que no ve, puede interactuar con un sistema de computadora. La accesibilidad se incrementa como nunca antes. Cada vez que se reduce la fricción la cantidad de personas que puede usar estos sistemas y su productividad de incrementa en volúmenes que no se pueden anticipar fácilmente.

En noviembre de 2022 la aparición de Modelos Grandes de Lenguaje (LLM) nos trae unas posibilidades de interacción personalizada que reduce de manera impensable la fricción entre los sistemas de computadora y los usuarios. ¿Qué nos depara el futuro el futuro cercano?

Aquí algunas tecnologías que, aunque no hayas visto, ya son o pueden ser una realidad:

1. Aplicaciones Efímeras y Personalizadas: En un futuro cercano, la tecnología podría permitir que las aplicaciones se generen de manera temporal y específica para una tarea o necesidad puntual, desapareciendo una vez cumplido su propósito. Esto significa que podríamos tener aplicaciones que se auto-configuran para una reunión de trabajo, una sesión de ejercicio o una experiencia de aprendizaje, y una vez que la actividad se completa, la aplicación se desintegra, liberando espacio y recursos. Esto ya presenta la posibilidad de dispositivos tan pequeños e inteligentes que podría hacer desaparecer el teláfono inteligente como lo conocemos.
2. Fabricación Instantánea: La impresión 3D promete una revolución en la fabricación personal y doméstica. En lugar de comprar productos pre-fabricados, los consumidores podrán diseñar o descargar diseños y materializarlos en casa. Esto no solo personaliza los objetos que usamos sino que también puede reducir la huella de carbono asociada con la producción y distribución masiva.
3. El Fin del Inventario Tradicional: Las fábricas del futuro podrían operar bajo un modelo de demanda, utilizando impresoras 3D y otros métodos de fabricación automatizados para producir bienes solo cuando se necesiten. Esto elimina el costo y el espacio requerido para almacenar inventario, reduce el desperdicio y permite una personalización masiva de productos.
4. Realidad Aumentada en la Vida Cotidiana: La realidad aumentada (AR) podría convertirse en una parte integral de nuestras vidas diarias, superponiendo información útil y personalizada sobre el mundo real. Desde mejorar la experiencia de aprendizaje en las aulas hasta cambiar la forma en que navegamos por las ciudades y consumimos publicidad, la AR tiene el potencial de enriquecer nuestras interacciones diarias con el mundo.
5. Era de la Suscripción: El modelo de suscripción ya está transformando la forma en que consumimos medios y software. En el futuro, esto podría expandirse a bienes físicos, como automóviles, muebles o incluso ropa, con consumidores pagando por el acceso en lugar de la propiedad, lo que permite una mayor flexibilidad y personalización.
6. Interfaz Cerebro-Computadora Avanzada: Las interfaces cerebro-computadora (BCI) podrían permitir controlar dispositivos y aplicaciones simplemente con nuestros pensamientos. Esto tiene aplicaciones potenciales en campos tan diversos como la medicina, donde los pacientes con discapacidades podrían operar prótesis con su mente, y en la computación, donde la eficiencia de la interacción humano-computadora podría mejorar drásticamente.
7. Revolución de la Computación Cuántica: La computación cuántica promete resolver problemas que actualmente son demasiado complejos para las computadoras convencionales. En el campo de la criptografía, podría ofrecer seguridad a prueba de futuras amenazas, protegiendo la información contra los ciberataques más sofisticados.
8. Realidades Híbridas Personalizadas: La fusión de tecnologías como la realidad aumentada (AR), la realidad virtual (VR) y la realidad mixta (MR) podría conducir a la creación de entornos digitales que se adapten a nuestras preferencias personales, brindando experiencias únicas y a medida, ya sea para entretenimiento, trabajo o interacción social.
9. Personalización en la Manufactura: La inteligencia artificial combinada con técnicas de fabricación avanzadas podría permitir la producción de bienes personalizados según las especificaciones exactas del consumidor. Esto cambiaría radicalmente la producción y la cadena de suministro, permitiendo una mayor individualización de los productos.
10. Ecosistemas de Energía Sostenible y Autónomos: El avance en las tecnologías de energía renovable y el almacenamiento de energía podría permitir el desarrollo de ecosistemas energéticos que sean autónomos y sostenibles. Esto significa que las comunidades podrían generar y almacenar su propia energía, reduciendo la dependencia de los combustibles fósiles y avanzando hacia un futuro más sostenible a nivel global.

Estas visiones del futuro inmediato perfilan un panorama donde la tecnología, casi imperceptible y elegantemente minimalista, se adapta y prevé nuestras necesidades con una precisión intuitiva. Se vislumbra una simbiosis sin fisuras entre el ser humano y su entorno, donde la tecnología se integra de manera tan natural que su presencia se siente solo en la facilidad con la que mejora la vida cotidiana. En esta nueva era, la tecnología se convierte en una extensión sutil pero poderosa de nosotros mismos, actuando como un catalizador silencioso de innovación y eficiencia que eleva nuestra existencia a cumbres hasta ahora desconocidas. Su diseño y funcionalidad se desvanecen en el tejido de nuestra realidad diaria, asegurando que la experiencia del usuario sea fluida y orgánica, fomentando un entorno en el que la innovación no es solo una herramienta, sino un compañero constante en la búsqueda del progreso y la armonía.